Con motivo de la
presentación por parte del Ministerio de Interior de datos del Balance de
Criminalidad, este sindicato manifiesta lo siguiente:
El análisis de que
desciende la criminalidad por el descenso del número de infracciones penales es
poco prudente, falto rigor y válido exclusivamente atendiendo a valores
absolutos y análisis numéricos generales.
La estadística debe
conceptuarse como un instrumento que unido a otros análisis sociológicos
permita establecer que la implementación de determinadas medidas siguen el
camino adecuado o necesitan una corrección, y no como un fin que determine por
sí sólo la adecuación o no de las medidas. Las cifras negras de criminalidad (infracciones
que no se denuncian) que algunos estudiosos estiman en el 50%, y la asimetría
de tipificación entre la Policía y los Tribunales de Justicia y Fiscalía, son
dos razones, entre otras, que determinan la necesidad de obrar con prudencia en
el análisis de datos de criminalidad.
Por poner un ejemplo,
la disminución de valor numérico en el indicador de tráfico de drogas puede
deberse al menor número de denuncias, detenciones o incautaciones por parte de
las Fuerzas de Seguridad por falta de medios humanos, técnicos y materiales, y
no a la reducción en sí de problema o a un menor tráfico.
Los robos con fuerza
en domicilios, que preocupan muchísimo a los ciudadanos por su gravedad y
peligro siguen aumentando y con niveles muy altos, a pesar del enorme esfuerzo
de las Fuerzas de Seguridad, que necesitan urgentemente más medios humanos,
materiales y técnicos para contrarrestar y erradicar este delito.
Los robos con fuerza
e intimidación siguen siendo altísimos en valores absolutos, aunque con un
grato descenso que bien pudiera ser puntual y no con tendencia al descenso.
Igual análisis con respecto a los hurtos.
Con respecto a
Asturias, y evitando analizar valores absolutos que pueden difuminar la
realidad, debemos manifestar que llevamos tiempo denunciando al Ministerio de
Interior que se produciría con seguridad
un repunte de la criminalidad por maltrato a los policías en sus derechos
profesionales, económicos y estatutarios, por falta de inversión en “la
policía” que perjudicaría una buena prevención operativa, la falta a nuestro
entender de buena gestión en algunas Comisarías de Asturias, así como el
desprecio sufrido por este sindicato por algunas Administraciones a las que
pretendíamos trasladar la realidad de las calles asturianas, sin aditivos ni
intereses de índole político, y nuestra opinión sobre determinados planes
policiales, lo que unido al deterioro social actual, las dificultades extremas
de muchos ciudadanos y el aumento de la marginalidad produciría estos efectos.
Desde el SUP pedimos
prudencia en los análisis sobre la criminalidad, y venimos advirtiendo al
Gobierno que la desinversión en las Fuerzas de Seguridad no es buena política,
la falta de inversión en medios materiales, humanos, y tecnológicos no va a
poder ser eternamente contrarrestada con la gran profesionalidad de los
policías, a los que cada vez les cuesta más hacer su trabajo de proteger a los
ciudadanos y garantizar la seguridad ciudadana.
En Asturias las
Fuerzas de Seguridad seguirán realizando su tarea con el máximo esfuerzo y
dedicación, con profesionalidad y responsabilidad, hasta donde puedan, a pesar
de los recortes extremos y el ataque a los derechos profesionales y económicos a
los que se encuentran sometidas.
Matías A. Castaño
Vázquez
Secretario General
SUP Asturias
SINDICATO
UNIFICADO DE POLICÍA.
