¡COMPAÑEROS!
Las últimas actuaciones sindicales de la CEP y del SPP han supuesto un cambio de sentido con respecto al tratamiento sindical que venía aplicándose en relación al estilo de mando y a las decisiones y prácticas que se ejercían y siguen ejerciéndose por la Dirección de la Dependencia Policial de Gijón.
Parece ser que el SUP ya no cuenta en Gijón para estas dos organizaciones en el camino marcado tiempo atrás por todas, entre otros, por los siguientes motivos:
.- En la última reunión trimestral en Jefatura en la que el SUP presentaba una queja sobre la situación del SAF en general y sobre sus incidencias en particular, se responde que sólo los afiliados del SUP parece que tengan problemas y las dos organizaciones nada dijeron. Quien calla otorga.
.- El SUP se queda solo en la reivindicación de transparencia en la asignación de puestos en la Comisaría. ¡Ojo!, de todos los puestos, no sólo de los que puedan interesar. No se puede gritar a los cuatro vientos cuando la asignación de puestos no nos interesa y dar la callada más absoluta cuando nos beneficia, ya que en ambos casos el más que cuestionado procedimiento de asignación es el mismo. El SUP se queda solo en la petición de publicidad de los criterios asignados al puesto, de la puntuación asignada a los méritos aportados por cada solicitante, y de la posibilidad del interesado de acceder y conocer cuánta puntuación le ha faltado y en qué apartado en caso de no obtener la plaza. Era obsceno si al representante del SUP ejerciendo sus derechos, como el resto, se le otorgaba un puesto, pero deja de serlo cuando es al que critica a quien se le otorga. Necesitamos transparencia.
.- El SUP se queda solo cuando traslada las peticiones de información de sus afiliados y no afiliados sobre hechos relacionados con el Cuerpo Nacional de Policía en Gijón y se valora la posibilidad de presentarle una querella por ello. En lugar de suscribir la pregunta y mostrar que aquí estamos juntos para defender la libertad sindical en pro de la defensa de nuestros compañeros, especialmente de los más vulnerables y evitar intentos de colocar mordazas y retrotraernos a tiempos oscuros del pasado que algunos parece que añoran, nos acusan de poco elegantes. Quien olvida que el objetivo del sindicalismo no es quedar bien con todos, sino mojarse en la defensa de los derechos socio-profesionales de sus compañeros debería plantearse su posición, a no ser, claro, que la misma obedezca a exigencias del patrón. Y que definan el concepto de elegancia .
